lunes, 30 de mayo de 2011

A PASO DE CARACOL... RAY y ALBERTO



Articulo publicado en la columna Axioma de la Revista SUFRAGIO     

    
  A PASO DE CARACOL... RAY y ALBERTO
Mi hermano mayor Ray Ramírez Pérez, (Raycito le decimos los que lo queremos mucho) y nuestro amigo Alberto Mejía Nava, el 17 de abril, se montaron en sus bicicletas y se fueron rumbo al sur; su plan es llegar a Argentina en poco más o menos seis meses visitando en su trayecto 12 países; a la aventura le han llamado: PROYECTO CARACOL.
Ray Ramírez Pérez, y Alberto Mejía Nava,  son originarios de Puebla, con 53 y 54 años de edad respectivamente,  tienen experiencia  en disciplinas deportivas como: atletismo, parapente, alpinismo, bicicleta de montaña, escultismo, primeros auxilios, entre otras; Ray es de oficio relojero, y Alberto comerciante.
            ¿Recorrer en bicicleta miles de kilómetros  a los cincuenta años de edad?
A muchos les puede parecer una locura o, por lo menos, una idea descabellada, muy difícil de lograr,  pero los que hemos vivido  con el ejemplo de Ray, no se nos hace raro; sabemos que va a lograr eso y mucho más. De hecho, si los cinco hermanos Ramírez (4 incluyéndome ), hemos pisado la cumbre de algunos montañas, y vivido aventuras deportivas que no viene al caso mencionar, es porque, indiscutiblemente, Raycito nos ha inspirado y en muchos casos hasta dirigido.
            Alberto Mejia, aparte  de ser como un hermano más de los Ramírez,  es un experto  alpinista, lo conocimos en curso de montaña impartido en la BUAP hace… ya no me acuerdo cuánto, pero más de 20 años;  me enorgullece decir que con él fue  que por primera vez, pise la cumbre del Pico de Orizaba, es  sin duda un disciplinado deportista, ejemplo de compañerismo,  y solidaridad;  en definitiva Ray y Alberto no pudieron encontrar mejores compañeros de viaje y aventura.
            ¿Qué los motiva a esta verdadera odisea?
            A los dos los entrevisté el 17 de abril, en el zócalo de esta ciudad, el día  que  partieron, Ray me respondió: “Esto empezó cuando yo era adolescente conocí a un muchacho que viajaba de aventones, hicimos el proyecto de hacer un viaje así, pero por alguna razón con el tiempo  se frustró, con el paso de los años y por influencia de amigos he practicado algunos deportes y tenía  la inquietud de hacer un recorrido hasta Cancún o Guatemala; conocí a Alberto hace 20 años, juntos hemos hecho muchas cosas, iniciamos este sueño. Pensamos llegar a Argentina en aproximadamente  seis meses  visitando 12 países”
Pos su parte Alberto me explicó: “Yo busco, más que nada, aprender de la vida y demostrar  que podemos hacer otras cosas sin necesidad del automóvil, que podemos salvar  nuestro planeta, y si todos contribuimos con usar más la bicicleta podemos contaminar mucho menos; ojalá que esta aventura sirva para que nuestros hijos o las generaciones futuras, tomen conciencia de lo que estamos haciendo con nuestro planeta”.
AL momento de salir publicadas estas líneas, Alberto y Ray  habrán abandonado el suelo mexicano y estarán en territorio guatemalteco. Esos que piensan que a los 50 años es comenzar a ser “viejo” que vean el ejemplo que nos dan  Ray y  Alberto, en este preciso momento  ¡¡VAN RUMBO A ARGENTINA ABORDO DE SUS BICICLETAS!!.
Por cierto que, el año pasado,  Alberto y Ray acudieron a algunas dependencias tanto estatales como municipales, de esas que dicen que apoyan el deporte y a los deportistas,  tan sólo para solicitar una carta que los acreditara como lo que son: deportistas poblanos. De esta manera  confirmaron lo que la mayoría sabemos: que los “apoyos al deporte” son sólo para el lucimiento personal de los “responsables”, y los encabezados de periódicos, radio y TV; esta aventura esta costeada íntegramente con los recursos de los viajeros.
            Escribe: Seffh Ramírez Pérez